lunes, 15 de marzo de 2010

In the flesh.



Y contrario a Platón, Proust le permitió el mundo de las ideas al arte:



“Peter Quince al clavicordio”

IV

La belleza es momentánea en la mente--
El trazo ligero de un portal;
Pero en la carne, es inmortal.

El cuerpo muere; la belleza del cuerpo vive.
Así mueren las tardes, en su verde curso,
Onda en perpetuo flujo.
Así mueren los jardines, su dócil aliento perfumando
El capuz del invierno, contrito.
Así mueren las doncellas, en el auroral
Festejo de un coral de doncella.

La música de Susana tocaba las lujuriosas fibras
De aquellos blancos ancianos; pero al huir,
Dejó sólo el irónico rasguño de la Muerte.
Ahora, en su inmortalidad, toca
La clara viola de su memoria,
Y hace de la alabanza un constante sacramento



Wallace Stevens.